¿Qué pasa si tu investigación es un plagio?

El plagio es la práctica poco ética de utilizar palabras o ideas de otro autor —o de trabajos que hayas realizado— sin el debido reconocimiento. Considerado como una falta académica e intelectual grave, el plagio puede tener consecuencias muy negativas, como anulación del trabajo, expulsión de la universidad, pérdida de credibilidad y reputación del autor.

Actualmente, es un recurso que, infortunadamente, se utiliza en las publicaciones académicas y es una de las principales razones para no obtener el título.

En la historia mundial, se ha visto que varios personajes han tenido problemas por esta práctica poco común; por ejemplo, el actual presidente de Rusia, Vladimir Putin, fue acusado por investigadores del Instituto Brookings por plagiar el 75 % del texto de su tesis de posgrado en el Instituto de Minería de San Petersburgo, en el año de 2006.

Lo mismo sucedió con el expresidente de México, Enrique Peña Nieto, culpado de plagiar el 30 % de su tesis final en la Universidad Panamericana.

Sin ir tan lejos, recientemente, vimos cómo, presuntamente, la presidenta de la Cámara de Representantes de Colombia, Jennifer Arias, plagió su investigación, luego de que la Universidad Externado de Colombia se diera cuenta que su tesis tenía un importante número de coincidencias con fuentes o documentos publicados en Internet.

En Colombia, según el art. 270 del Código Penal señala que esta práctica tiene una pena de 32 a 90 meses de prisión y una multa de 26,66 a 300 salarios mínimos mensuales legales vigentes por infracción a los derechos morales y patrimoniales del autor.

Según el sitio web plag.co, los estudiantes podrían tener las siguientes consecuencias por realizar esta práctica:

– Expulsión de tu carrera universitaria.
– Anulación de tu trabajo.
– Exclusión de tu institución académica, y en algunos casos, retiro permanente.
– Podría resultar en acciones legales, multas y penalizaciones, entre otros.

Antes de que el diablito que tienes en tu hombro te haga realizar esta torpeza, piensa primero que está en juego no solo tu reputación, sino también tu futuro laboral y profesional.